SURESTE MEXICANO — El sur de México no solo se distingue por su riqueza natural y arqueológica, sino también por una gastronomía profundamente enraizada en la historia, la biodiversidad y la tradición indígena. Desde los tamales chiapanecos hasta los mariscos campechanos, la cocina del sur es un mapa sensorial que revela el alma de cada estado.
En un recorrido culinario por Chiapas, Campeche, Tabasco, Oaxaca, Quintana Roo y Yucatán, descubrimos sabores únicos que siguen siendo preparados como hace siglos, con ingredientes locales y técnicas heredadas de generación en generación.
🌽 Chiapas: tamales, café y cocina de montaña
La gastronomía chiapaneca es tan diversa como su geografía. En las montañas, destacan los tamales de chipilín, elaborados con una hierba tradicional y envueltos en hojas de plátano. En la zona de Los Altos, es imperdible el cochito horneado, cerdo marinado en adobo y cocido lentamente.
“En Chiapas, cada comunidad tiene su propia versión de los tamales. Son símbolo de identidad y celebración”, comenta Rosa Aguilar, cocinera tradicional en San Cristóbal de las Casas.
No se puede hablar de Chiapas sin mencionar su café de altura y el tascalate, una bebida ancestral a base de maíz, cacao y canela.
🐟 Campeche: sabores del mar y de la selva
Campeche es tierra de pescadores y de herencia maya. El pan de cazón —una especie de lasaña hecha con tortillas, frijoles y carne de tiburón— es el platillo estrella. A ello se suma el pescado tikin xic, marinado en achiote y cocido al carbón, así como los papadzules, tacos bañados en salsa de pepita de calabaza.
“Campeche combina ingredientes marinos con especias mayas. Es una cocina que sorprende por su delicadeza”, señala Eduardo Cahuich, chef originario de Champotón.
🌶️ Tabasco: picante, cacao y tradición
La cocina tabasqueña es potente, húmeda y llena de carácter. El pejelagarto asado, un pez prehistórico típico de los ríos del estado, es uno de los manjares más buscados. También sobresalen los plátanos machos en molito dulce y el chirmol, una salsa a base de jitomate y chiles.
El cacao es parte esencial de su identidad, utilizado tanto en bebidas como en platos salados. “En Tabasco, el chocolate no es solo postre: es herencia viva”, dice Luz María García, productora artesanal de Comalcalco.
🌮 Oaxaca: moles infinitos y mezcal
Considerada una de las capitales gastronómicas de México, Oaxaca ofrece una cocina compleja y profundamente ritual. Los siete moles tradicionales, como el mole negro o el coloradito, son el corazón de su cocina.
El tlayuda, una gran tortilla crujiente con asiento, quesillo, cecina y salsa, es un platillo callejero imperdible. Y el mezcal, por supuesto, no puede faltar como digestivo o como ingrediente en cocina contemporánea.
🐚 Quintana Roo: fusión costera y caribeña
En el Caribe mexicano, la cocina se reinventa con toques internacionales. Sin embargo, en las comunidades mayas de Quintana Roo, sobreviven sabores tradicionales como los salbutes, panuchos, y el relleno negro, elaborado con carne de pavo y recado oscuro.
En la costa, los ceviches caribeños y los tacos de pescado al pastor muestran la influencia de las especias y el limón, con una frescura inigualable.
🌞 Yucatán: herencia maya en cada bocado
La gastronomía yucateca es una mezcla de tradición maya y mestiza. El famoso poc chuc (cerdo marinado en naranja agria), la cochinita pibil cocida en horno bajo tierra, y la sopa de lima son solo algunas muestras de una cocina con carácter propio.
“La comida yucateca se prepara con tiempo, fuego lento y mucho respeto por los ingredientes”, comenta Don Rubén Tun, cocinero tradicional de Valladolid.
🌎 Una cocina con raíz y alma
La cocina del sur de México no solo alimenta: narra, conecta y emociona. Es el reflejo de pueblos que han sabido resistir y reinventarse, usando sus sabores como puente entre el pasado y el presente.
En cada platillo típico, hay una historia que merece ser contada… y saboreada.
INGLES
SOUTHEASTERN MEXICO — Southern Mexico is not only known for its natural beauty and archaeological richness but also for a cuisine deeply rooted in history, biodiversity, and indigenous tradition. From Chiapas’ tamales to Campeche’s seafood, southern cooking is a sensory map that reveals the soul of each state.
On a culinary tour through Chiapas, Campeche, Tabasco, Oaxaca, Quintana Roo, and Yucatán, we discover unique flavors still prepared just as they were centuries ago—with local ingredients and ancestral techniques passed down through generations.
🌽 Chiapas: Tamales, Mountain Flavors, and Fine Coffee
Chiapas’ gastronomy is as diverse as its geography. In the highlands, chipilín tamales—made with a traditional wild herb and wrapped in banana leaves—are a must. In the Los Altos region, the cochito horneado (adobo-marinated baked pork) is a standout dish.
“In Chiapas, each community has its own version of tamales. They’re a symbol of identity and celebration,” says Rosa Aguilar, a traditional cook in San Cristóbal de las Casas.
No culinary talk about Chiapas is complete without its high-altitude coffee and tascalate, an ancestral drink made from corn, cocoa, and cinnamon.
🐟 Campeche: Sea and Jungle on the Plate
Campeche is a land of fishermen and Maya heritage. Its signature dish is pan de cazón, a lasagna-like stack of tortillas, black beans, and shark meat. Also worth trying is pescado tikin xic, fish marinated in achiote and grilled, as well as papadzules, tortillas drenched in pumpkin seed sauce.
“Campeche’s cuisine blends sea ingredients with Maya spices. It’s delicate and full of character,” explains Eduardo Cahuich, a chef from Champotón.
🌶️ Tabasco: Bold Flavors and Cocoa Heritage
Tabasco’s cuisine is bold, humid, and full of character. The grilled pejelagarto, a prehistoric river fish, is a local delicacy. Other highlights include plantains in sweet mole and chirmol, a tomato-and-chili-based sauce.
Cacao plays an essential role here, used in both beverages and savory dishes. “In Tabasco, chocolate isn’t just dessert—it’s a living heritage,” says Luz María García, an artisan producer from Comalcalco.
🌮 Oaxaca: Infinite Moles and Mezcal
Oaxaca is often called the gastronomic capital of Mexico, with a cuisine that is both complex and ritualistic. The famous seven traditional moles, like mole negro and coloradito, are the heart of its culinary identity.
The tlayuda—a large crunchy tortilla topped with beans, cheese, cecina (salted pork), and salsa—is a street-food favorite. And of course, mezcal is ever-present, both as a drink and an ingredient in modern cooking.
🐚 Quintana Roo: Coastal Fusion with a Caribbean Twist
In Mexico’s Caribbean, cuisine often mixes with international influences. But in Quintana Roo’s Maya communities, traditional dishes like salbutes, panuchos, and relleno negro (turkey in dark spice paste) are still cherished.
On the coast, Caribbean-style ceviches and fish tacos al pastor reflect a love for citrus and spice with unmatched freshness.
🌞 Yucatán: Maya Legacy in Every Bite
Yucatán’s cuisine is a blend of Maya and mestizo traditions. The famed poc chuc (pork marinated in sour orange), cochinita pibil (pit-roasted pork), and sopa de lima (lime soup) are just a few of the region’s signature dishes.
“Yucatecan food is slow-cooked, made with patience, and deeply respectful of its ingredients,” says Don Rubén Tun, a traditional cook from Valladolid.
🌎 A Cuisine with Roots and Soul
The food of southern Mexico does more than nourish—it tells stories, forges connections, and stirs emotions. It reflects the resilience and creativity of cultures that have endured through centuries, using flavors as bridges between past and present.
In every typical dish, there’s a story worth telling—and tasting.