Por Maya Turistic
La bamba es una canción tradicional mexicana de autor anónimo. Pertenece al género musical denominado son jarocho y es reconocida como un himno popular de la ciudad de Veracruz. Como danza tradicional, «La bamba» se inscribe dentro del contexto de las llamadas danzas de pareja; normalmente bailan un hombre y una mujer, aunque en algunas comunidades bailan dos o más parejas. En México, en los años 50, el compositor y artista más popular del Cine de Oro, Andrés Huesca, dio a conocer «La bamba».
Se presume que «La bamba» fue creada en los últimos años del siglo xvii. Inicialmente, la canción satirizaba los esfuerzos tardíos e inútiles realizados por el virrey de México para defender a los ciudadanos del puerto de Veracruz de los piratas. Asimismo, su nombre alude también a un baile de origen español denominado bamaba, que era popular en esa época. En los registros históricos del género tradicional llamado son jarocho, las referencias más antiguas que se conocen de «La bamba» provienen de la localidad de Alvarado, donde —según ellas— se interpretaba con un ritmo muy jovial y fresco, en comparación con la forma de interpretación más lenta y pausada propia de la región de Los Tuxtlas y la planicie costera de Sotavento.1 Durante más de tres siglos, «La bamba» continuó siendo cantada y danzada sobre todo en Veracruz, donde adquirió un carácter muy emblemático y representativo de ese estado.
Leyenda de su origen
Algunas leyendas dicen que llegó hasta este lugar invitado por unos peones que había conocido por el camino.
Los documentos de la época refieren que “El Guaruso” lucía siempre contento en la región principalmente por una guapa medellinera, llamada Rita la “China” que siempre lo traía embullado.
Un día, no precisado por la historia, mientras la gente hacía la tumbada en el cañaveral, llegó a la hacienda Sabás, el recadero de doña Beatriz, para anunciar la invasión de un grupo de embarcaciones piratas.
El día de la invasión
Lo anterior se verificó, cuando por la punta de Antón Lizardo se observó las embarcaciones piratas, con el capitán Lorencillos que tenía como destino el puerto de Veracruz.
De entre el grupo de peones se distinguía “Malanga”, e mulato fornido de quien refieren documentos de la época gozaba de los favores de Doña Beatriz.
Malanga organizó a la peonada y con arengas valerosas cautivó a los hombres a la lucha por la defensa de la hacienda y las mujeres. Mientras tanto, un singular personaje, cantaba sin cesar y en tono irreverente:
“Quitilan, quitilan,/ que suenan las campanas de Malibrán/, qué vienen los piratas que no vendrán…/ Qutilín, quitilín,/ que suena la campana de Medellín/ y que suena y suena a rintintín”.
En un momento determinado, “Malanga” regresó a la hacienda donde ya lo esperaba Doña Beatriz acompañada de las mujeres y los niños.
“¿Qué harán ustedes?, – preguntaba la propietaria de la hacienda – que ni marineros son”.
El noble mulato respondió: “No soy marinero, pero aquí seré”.
Finalmente, el pirata Lorencillo había pasado de frente rumbo al Playón de Hornos para ubicar sus barcos en el bombardeo al puerto. Los hechos se convirtieron en fiesta en la hacienda.
Mientras tanto, “El Guaruso” , ya en la borrachera entonó su copla.
De esta forma refieren historiadores como Ramón Río García y Francisco Ávila Rivera, que en tiempos de La Colonia, El Guaruso, entonó este canto inmortal.
Al tiempo se convirtió en típica ejecución en bailes y fandangos.
Posteriormente se consagró como la reina del son jarocho.
La palabra bamba es de origen africano que significa fiesta, huateque o celebración.
Al tiempo esta inmortal canción se ha convertido en la reina del son jarocho para Veracruz, realizando bailes y fandangos con diversas coplas dependiendo de su interprete. Tú también disfruta de este son jarocho en Veracruz, pero al estilo Maya Turistic.