Maní es una ciudad pequeña ubicada al sur del es- tado, muy cercana a Ticul. Recién nombrado Pueblo Mágico de México, el 1 de diciembre del 2020.
Es famosa por ser el epicentro de la llamada Ruta de los Conventos, en la que se pueden conocer las iglesias y conventos más representativos de Yu- catán. Destaca por contar con una de las capillas abiertas más impresionantes de América Latina, un convento que te transporta a los tiempos de los frailes, así como haber sido testigo de pasajes im- portantes de la historia de la conquista en la Pe- nínsula.
Mani no es una recién joya encontrada si no, una tierra mágica que remonta los inicios de su nombre a la lengua maya “Lugar donde todo pasó“ o “Manik“ día del calendario maya relacionado con el vena- do. Aunque no hay datos históricos exactos del ini- cio de la ocupación de dicha región por los mayas, gracias a la evidencia arqueológica en el cenote Xcabachen y los conjuntos arquitectónicos explo- rados en Tipikal, localidad ubicada en el municipio, se estima que grupos humanos se establecieron en este lugar hacía el período preclásico medio, apro- ximadamente entre los años 1000 y 400 A.C.
Una joya pura llena de historias y leyendas. Cami-
nando por sus calles te puedes encontrar edificios con fachadas únicas, plazas, capillas (Santa Lucía y Santiago). Si tienes suerte puedes encontrarte jó- venes oriundos de Maní dispuestos a contarte al- gunas leyendas relacionadas con el cenote Xca- bach’e’en y el reinado de los Xiú en estas tierras.
El Poc Chuc, plato estrella de la gastronomía yu- cateca. Maní es famoso por el sabor que encon- trarás en el restaurante Principe Tutul Xiú, de gran tradición y una parada obligada para visitantes y donde puedes encontrar a cocineras tradicionales vistiendo hermosos vestidos tipocos lleno de color, puesta otra maravilla es el Arte textil, X’manikté que significa “siempreviva“ y hace referencia a lo eterno. Es una de las técnicas de bordado más antiguas en Yucatán.
Retomando el sabor, es un lugar muy típico con platos regionales, tortillas hechas a mano, frijol co- lado, cebolla morada con chile habanero y aguas fresca de la región. Toda una delicia que bien vale la pena disfrutar de mano expertas.
Puedes visitar esta joya de Yucatán en en auto: To- mando la salida de Mérida hacia Cancún (oriente), sigue hasta la salida a Chetumal / Acancéh. Ma- neja 92 km pasando Acancéh, Tecoh, Tekit y Teabo.