By admin Por Maya Turistic
Campeche, en la península de Yucatán, uno de los estados con más historia, cultura y belleza natural de México, a poco menos de dos horas de vuelo de la Ciudad de México. Es un territorio único en diversidad y riqueza, pues tiene todo desde fastuosas pirámides mayas hasta ciudades coloniales multicolores, pasando por algunos de los espacios naturales más biodiversos de México, y por haciendas restauradas que aún conservan su antigua gloria.
Entre 1500 y 1700, la travesía marítima entre Las Américas y España era uno de los viajes más peligrosos del mundo, por la constante amenaza de los piratas ingleses y franceses y a quietud de una villa como Campeche fue quebrantada por los piratas, quienes llegaron a esta tierra para saciar su hambre de saqueo, por ser este puerto la salida y entrada de mucha riqueza.
El año de 1559 marcó el inicio de ese tipo de invasión de los famosos piratas, que en sus barcos arribaban a Campeche para amenazar la seguridad y economía del que se significara como el punto económicamente más activo de la Península de Yucatán, y con una salida al mar que lo hacía aún más atractivo para la bonanza.
La historia, que data del siglo XVI, nos remonta a comprender el porqué de la importancia de la figura de los piratas en la cultura de los campechanos, que incluso dejaron su sistema amurallado de defensa de la villa que permanece como un atractivo cultural y turístico para los visitantes.
la construcción de la famosa muralla de Campeche, con alrededor de dos kilómetros de extensión y ocho baluartes, y los fuertes de San José el Alto y San Miguel, que hoy pueden visitarse y que resguardan interesantes museos.
Barcos, cañones, murallas y ataques para llevarse productos de gran valía son parte de Campeche, pues la historia lo marcó así al ser colonia de España y base mercantil de los productos que desde ese punto salían hacia Europa.
La historia cuenta que los invasores atacaron constantemente a Campeche y los pobladores al principio indefensos y tomados por sorpresa, se organizaron para protegerse, para luchar contra el enemigo y más tarde edificar las murallas que se convirtieron en el sistema de seguridad único en América.
En la actualidad, el recinto tiene en sus salas objetos personales de los ladrones del mar como vasijas, espadas, baules, llaves, grilletes, platos, armas, brújulas, relojes, mapas, réplicas de los navíos, vestimentas, biografías de los personajes más sanguinarios que arribaron a este puerto y los capítulos que marcaron en la historia de Campeche.
Es por eso que era necesario tomar acciones para defender la villa y se empieza a pensar en cómo amurallarla y poner bases militares en las partes altas, para alertar y defender a la población de ataques piratas.
La población de la villa, vivía en alerta permanente, se establecieron mecanismos de vigilancia y avisaban con un disparo al notar la presencia de barcos desconocidos para dar tiempo a la gente que se escondiera.
Uno de los asaltos de más destrucción fue el realizado en 1633, encabezado por Cornelius Holz alias “Pie de palo” y Diego “El Mulato”, quienes invadieron y saquearon la villa durante tres días pese a la defensa organizada de 300 hombres para contener la delincuencia.
El desfile de piratas siguió con Bartolomé “El Portugués”, Juan David Nau “El Olonés”, Laurent de Graff “Lorencillo”, William Parker, Cornelius Holz, Diego “El Mulato”, Jacobo Jackson “El conde de Santa Catalina”, Henry Morgan, Rock “El Brasiliano”, Lewis Scott, entre los más sanguinarios. El desfile de piratas siguió con Bartolomé “El Portugués”, Juan David Nau “El Olonés”, Laurent de Graff “Lorencillo”, William Parker, Cornelius Holz, Diego “El Mulato”, Jacobo Jackson “El conde de Santa Catalina”, Henry Morgan, Rock “El Brasiliano”, Lewis Scott, entre los más sanguinarios.
El fin de la piratería se dio en 1704, cuando se cerró el hexágono que rodeaba a la villa, asegurándola para siempre. En la actualidad estos episodios de la historia campechana se evidencian en los trazos de sus calles rectas que permiten tener una visibilidad a “tiro de arcabuz”, casas con paredes gruesas y ventadas con rejas de hierro y que los nombres de esos sanguinarios quedaran grabados en bares, restaurantes y muchos comercios de la zona.
A un pasado que permanece inerte en las murallas, en la puerta de madera con herrajes que permite entrar al mundo de los filibusteros, corsarios y piratas, formando parte de la historia de Campeche.
Ven a Campeche y conoce la historia que quedo grabado tras la lucha de sus habitantes y los piratas en las calles de este lugar.
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