En esta ocasión nos sorprendimos cocinando las
canelitas de malanga (los nuevos retoños).
Si bien sabemos que normalmente comemos su
raíz, dándole uso como si fuera papa o yuca y
logra ser tan versátil que puede llegar a prepararse de manera inimaginable, en esta ocasión
la atención la tendrá sus hojas.
Es muy importante señalar que este alimento
debe saber prepararse, por conocedores, ya que
de lo contrario su salvia puede llegar a provocar
severas alergias en la piel o el tracto digestivo.
Su preparación es: cortar los pequeños brotes,
ojo las hojas grandes no se comen, una vez seleccionados se comienzan a romper en peque-
|Por: Alexandra Díaz|
LA MALANGA
ños pedazos como un tipo ensalada se colocan
sobre hojas para tamal típicas de la región y se
manda al fogón a asar por unos 30 minutos,
una vez que las hojas externas ya este completamente quemada se retira del fuego se sirve
con sal y limón. Es ideal como guarnición para
acompañar tu platillo preferido.
Como en casi todas las verduras, las hojas son
ricas en vitaminas y minerales. Son buena fuente de hierro, fósforo y zinc, así como de vitaminas B6, vitamina C, potasio, cobre y magnesio.
La raíz por tanto tiene alto contenido en almidón y son una gran fuente de fibra dietética.
Convirtiéndose en uno de los principales alimentos de las comunidades rurales.